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Nadie duda que la educación es factor determinante para superar la pobreza y lograr sociedades más productivas, equitativas, solidarias y pacíficas.
Un sistema educativo es bueno en la medida de su capacidad para acoger a tiempo a la población, retenerla y facilitarle la adquisición progresiva de las competencias necesarias para aportar al bienestar propio y de la sociedad. En este sentido, hemos avanzado mucho. No obstante, las cifras indican notables diferencias entre la situación de los pobladores del campo y aquellos de las cabeceras municipales, especialmente si se consideran las zonas con mayor dispersión poblacional. ( Ver gráficos Asistencia escolar de la población entre 5 y 17; Asistencia escolar de 12 a 17 años, Asistencia escolar de 5 a 6 años )
La asistencia escolar corresponde al reporte de si se está estudiando o no. En total, la diferencia entre las cabeceras municipales y la zona rural es superior a catorce puntos. Sin embargo, los resultados del censo indican que las mayores diferencias se encuentran en los grupos de edad de 5 a 6 y 12 a 17 años (más de 17 puntos en ambos casos).
Esto significa que, mientras todavía muchos niños de las zonas rurales ingresan al sistema educativo en una edad mayor que la de sus pares de las cabeceras municipales, muchos de ellos cursan sólo la básica primaria o los primeros años de la secundaria. En 2004, se calculaba que la población económicamente activa menor de 25 años, en las cabeceras municipales, contaba con tres años más de escolaridad que la misma de la zona rural (9.1. y 6.1 respectivamente)¹.
Una cantidad elevada de los jóvenes de la zona rural excluidos del sistema educativo tienen más de 13 años, sólo han cursado el grado 5° y muchos ya están vinculados a actividades productivas. Es urgente alcanzar la cobertura de educación básica para todos.
Actualmente, de un total que supera los 11 millones de niños y jóvenes matriculados, aproximadamente el 25% estudian en establecimientos de la zona rural, la mayoría oficiales². ( Ver cuadro Alumnos matriculados, sector oficial, por zona )
En el país existen, en total, aproximadamente 14.068 establecimientos educativos oficiales, de los cuales 10.248 se encuentran en la zona rural y representan una gran mayoría de las más de 43.000 sedes a donde acude la población. ( Ver cuadro Establecimientos y sedes por zona )
El hecho de que casi el 80% de las sedes educativas se dediquen a atender a la cuarta parte de los escolares, es consecuencia de la dispersión de la población rural y representa retos inmensos a los que debe responder la política educativa nacional.
Los esfuerzos de los próximos años se orientan a que todos los niños, niñas y jóvenes campesinos e indígenas puedan ingresar al sistema educativo y alcanzar niveles superiores de formación, que les den las competencias básicas y laborales para convivir como actores productivos y competitivos en cualquier medio. Esto contribuirá al logro de un mejor nivel de vida para los individuos como al progreso y crecimiento de la sociedad.
¹ DANE, Encuesta Continua de Hogares. Cálculos CID-UN.
² La población atendida por el sector privado apenas supera el 4%.
Altablero, 45, Una revolución educativa en marcha |