Las personas con discapacidad desarrollan las competencias comunicativas en su interacción con las demás. Para aquellas con discapacidad sensorial, como la limitación auditiva, se maneja la lengua de señas colombiana, que se trabaja como cualquiera otra. Estas personas requieren un intérprete de lengua de señas colombiana. En el caso de la población con limitación visual se usa el sistema de lectoescritura braille. Las poblaciones con otras discapacidades desarrollan sus habilidades comunicativas como lo hace cualquier niño o niña, en el ambiente de la escuela y en el ámbito de la interacción social.

Una persona iletrada se comunica fundamentalmente de manera oral. Puede recurrir a la verbalización, acompañada de cierto tipo de ayudas como los dibujos o los objetos concretos, que sirven para expresar una idea, un problema, una acción o un sentimiento.

La educación de adultos analfabetas se basa en el principio de que todos tienen saberes, conocimientos, habilidades y experiencias que deben ser reconocidas como un componente importante para el desarrollo de otras competencias.

En el caso de las etnias reconocidas en Colombia (indígenas, afrocolombianos, raizales y ROM) las competencias comunicativas se manifiestan de manera muy diversa. Sus expresiones tienen una relación directa con las manifestaciones culturales de origen y son heredadas de sus ancestros y de las tradiciones; son palpables a través de ceremonias y acciones cotidianas, y se constituyen en un factor esencial en la pervivencia de estos pueblos. De otra parte, el entorno natural juega un papel primordial en el desarrollo de sus competencias. (Si desea más información escriba a BQuintero@mineducacion.gov.co )