La Secretaría de Educación para la Cultura de Antioquia convocó a los municipios a reflexión y contó con los lineamientos del secretario, Humberto Díez Villa y del Ministerio de Educación Nacional.
Entendimos la transformación y la enmarcamos en los sueños y necesidades de la comunidad. Se elaboró un plan con acompañamiento de la Secretaría a la mayoría de los 56 foros realizados. El ejercicio consistió en seguir el curso del modelo educativo y pedagógico, para sopesar otras metodologías de enseñanza-aprendizaje. Esta pretensión incorpora análisis más amplios, ya que agrupa: la arquitectura escolar, el modelo de gestión, los escenarios de aprendizaje y la logística didáctica, donde la inteligencia de los directivos docentes debe vincular familia y escuela en el propósito de formar seres justos, reflexivos, críticos y útiles.
Las reflexiones se consolidaron por subregiones, y se presentaron al Foro Departamental, orientado por: Federico García, rector de la I.E. Jorge Robledo; Héctor Quintero Arredondo, de la Academia Antioqueña de Historia y asesor del Gobernador; Víctor Álvarez, investigador y Humberto Díez Villa, como moderador. Contamos con una participación de 140 representantes de 117 municipios no certificados, y muchísimos reportados desde sus establecimientos y las Ciudadelas Educativas a través del chat, llamadas telefónicas, internet y televisión.
La reflexión abordó aspectos particulares de las subregiones, estos fueron:
Occidente: Su organización social ha cambiado significativamente hacia una democracia participativa, con sujetos formados en valores para responder a la globalización, la competitividad y las tecnologías informáticas.
Oriente: La implementación de modelos educativos flexibles, mayor cobertura, irrupción de tecnología informática, recursos didácticos perfeccionados y el retorno de familias desplazadas a sus tierras, expresan cambios en la familia y la sociedad, después de haber resignificado su entorno de crisis.
Norte: En las condiciones de extrema pobreza de algunos de sus municipios, la familia se ha involucrado en la fusión de costumbres y comprensión de los "otros", para que el pasado sea insumo del futuro.
Suroeste: Reconoce en el Bicentenario otras voces de la Independencia, artística autóctona, apertura al mundo científico y multiétnico y coherencia en los niveles de estudio. La clave ha sido su desarrollo ligado a la cultura generada en los cultivos de café, la cual entrelazó aptitudes de productividad, disciplina, creación de riqueza y construcción del alma cafetera del país, que hacen de la educación el disfrute de un derecho.
Nordeste: Derechos humanos y libertad, en un contexto participativo e incluyente, para fraguar la identidad. Se ha denunciado la exclusión de la mujer del sistema educativo; y se reconoce hoy su protagonismo en el saber y la academia. Concluyen que una sociedad evidencia sus progresos, según las posibilidades que tiene la mujer para desarrollar sus potencialidades. Es decir, según el grado de libertad que ostente frente a los condicionamientos que pretende imponerle la sociedad.
(*) Organizadores y participantes en el Foro Regional.
Antioquia: Hacia la calidad educativa y cultural |