Con la Escuela del Maestro ya son más de 3000 los docentes que han recibido formación, a partir de sus expectativas y necesidades.

La Escuela del Maestro es un ambiente de aprendizaje y un laboratorio para el saber pedagógico, que apoya la coordinación y ejecución del plan de formación y capacitación por medio de procesos de reflexión, investigación, innovación y sistematización de prácticas y experiencias de aprendizaje en el aula.

Dicho proceso busca mejorar la calidad y está incluido en la propuesta del plan de desarrollo de la ciudad, "Medellín la más educada, una tarea de toda la ciudadanía". "El propósito es consolidar en el cuatrienio la Escuela del Maestro como un laboratorio para los docentes de la ciudad, con el fin de dignificar y reconocer su labor. Es la valoración de lo que son y de lo que hacen en el aula de clase", asegura María del Pilar Rubio, directora de la Escuela.

"En el año 2004 comenzamos a construir las redes pedagógicas con el objeto de unir a los docentes de área para que trabajaran entre ellos, compartieran inquietudes y progresaran juntos", señala Horacio Arango Marín, secretario de Educación de Medellín, uno de los impulsores de la iniciativa, que ya cuenta con diez redes pedagógicas. Estas redes hacen parte de un sistema general de formación, junto con la estrategia de aulas-taller, los semilleros de investigación y sistematización de prácticas pedagógicas y los cursos de actualización y capacitación.

"Se trata de construir una cadena que empieza con el plan de desarrollo, la formación del maestro, la cooperación y la institución educativa, bajo la coordinación de la Escuela del Maestro. Esta sirve como aglutinante y punto de encuentro para el análisis. Se trata, en últimas, de sumar recursos, sedes, universidades y voluntades, y montar un paquete de capacitación", subraya Arango.

El programa de capacitación se articula con los resultados de las pruebas de evaluación de competencias y con los Planes de Mejoramiento institucionales. Se analizan resultados y falencias y se programan los diplomados y las aulas-taller, que se proponen resolver dificultades detectadas. Además, se aplican encuestas a los maestros, lo que permite identificar las áreas en las que demandan ayuda.

Los énfasis actuales
La Escuela también tiene aulas-taller de ciencia y tecnología, lenguaje y matemáticas, estas últimas en convenio con la Universidad Nacional, que asume la parte teórico-práctica y utiliza la metodología de aula abierta, basada en el juego. Las aulas taller se definen como ambientes innovadores para hacer, experimentar, aprender y jugar desde la ciencia y la tecnología como elementos que acercan al conocimiento, mediante la exploración y el fomento de la creatividad.

"Por otra parte, en las aulas-taller se ofrece un posgrado en matemáticas con la misma Universidad, de un año de duración, en el que se enfatiza en álgebra, aritmética y geometría. La Secretaría subsidia un porcentaje de la capacitación y los maestros otro. Igualmente hay un programa en matemáticas y lenguaje con la Universidad de Antioquia. La capacitación hace énfasis fundamentalmente en lenguaje porque "si usted tiene que resolver un problema de matemáticas, lo primero que debe hacer es leer bien; si no, no puede resolverlo. Leer es la clave para biología, matemática, química, etc.", explica el Secretario.

Asimismo, con el Ministerio de Educación, Microsoft, las universidades Pontificia Bolivariana y Tecnológica, se lleva a cabo la formación de mil maestros en competencias informáticas aplicadas al salón de clases, agrega Arango. "También ofrecemos cursos de inglés, competencias ciudadanas, seminarios, conferencias y talleres, y una capacitación con Corpoeducación, Fundación Corona, Empresarios por la Educación y el Ministerio en competencias en gestión escolar, para rectores y coordinadores". Se maneja una pedagogía nueva, en un trabajo de grupo, que reemplaza la clase magistral con la presentación y análisis del problema, y la guía de un facilitador que orienta en el aprendizaje participativo.

Maestros al tablero
Una vez que el maestro ha pasado por la Escuela, explica en su institución lo aprendido, e "incluye las novedades en los Planes de desarrollo institucional". Con la capacitación, los docentes de Medellín están cambiando sus métodos de trabajo, fundamentalmente en informática, porque reciben más información, saben manejar más la internet y tienen otra estructura de trabajo. "Sabemos que quienes se capacitan, les cuentan y enseñan a otros, y eso crea entusiasmo y ganas de estudiar, lo que repercute en la labor en el aula", indica Horacio Arango.

El mayor impacto de esta capacitación es que los docentes se han dado cuenta de que es necesario formarse a partir de métodos agradables, que están contribuyendo a que Medellín tenga una educación de más calidad. El esquema ha sido viable porque el Plan Sectorial contempla el programa Maestros al Tablero. Ha sido vital la cooperación de las universidades y de las entidades privadas pero, básicamente, el deseo de aprender del docente. "Estamos ofreciendo calidad en forma muy económica, organizados con diferentes entidades, tanto públicas como privadas", destaca el Secretario de Educación.

"Actualmente se trabaja una propuesta de estímulos e incentivos a docentes: participar en eventos nacionales e internacionales, pasantías, diplomados y apoyo a sus producciones y sistematizaciones, que propicien la construcción de saber pedagógico", resalta María del Pilar Rubio.