La oferta educativa en Colombia está concentrada en las cabeceras municipales, lo que obliga a los niños a desplazarse de sus veredas o a renunciar a la posibilidad de recibir una educación de calidad. La mayoría de niños no tienen alternativa, debido a la lejanía de sus hogares o a la falta de recursos para trasladarse a un municipio que cuente con escuela. Muchos otros tienen acceso sólo a primaria, interrumpiendo pematuramente su proceso educativo.

Por esa razón el Programa de Educación Rural (PER) concentra todos sus esfuerzos en llevar más educación lo más cerca posible de los niños campesinos y en ayudarlos a vincular sus procesos de enseñanza-aprendizaje con su propio entorno. Las metodologías que promueve el programa incentivan el trabajo con el agro, de manera que los niños aprendan a manejar granjas nutricionalmente sanas, piscicultura, cunicultura, entre otros. Así, además de aprender, los niños ayudan a sus familias y contribuyen con el progreso del campo.

El Colegio Verde de Albarracín

Un ejemplo de las metodologías que promueve el PER está funcionando en Boyacá: el Colegio Verde de Albarracín atiende a 236 estudiantes mediante la propuesta Escuela Nueva en primaria y Posprimaria Rural en secundaria. Diariamente llegan a este colegio niños provenientes de diferentes veredas. Al tiempo que aprenden matemáticas, ciencias naturales y español, los niños, niñas y jóvenes trabajan en piscicultura, cunicultura, horticultura y técnicas modernas de cultivo que ellos, a su vez, enseñan a sus padres o abuelos.

La profesora Soledad Ruiz Higuera, del Colegio Verde Albarracín, dice que la experiencia ha sido satisfactoria porque "toda la comunidad se aglutinó para fortalecer y mejorar la educación, con la colaboración del Sena, las Juntas de Acción Comunal, las autoridades locales, el Ministerio de Educación, el sector productivo, los padres de familia y hasta los ex alumnos". El resultado son tres granjas con productos de la región y los cultivos piscícolas y de cunicultura. Los alumnos son responsables por niveles de los frutales, las legumbres y las demás hortalizas, mientras que la cunicultura y la piscicultura las trabajan todos en sus casas con el apoyo de las familias.

Estas opciones que ofrece desde hace un año este colegio son de enorme importancia para la región. La necesidad de ofrecerles educación a los jóvenes era tan grande, que muchos padres de familia hacían que sus hijos repitieran quinto de primaria varias veces, con tal de que no se quedaran en la casa sin hacer nada.

Mediante estas metodologías, los niños y jóvenes no sólo reciben una educación de calidad, sino que lo hacen cerca de sus hogares y de manera sincronizada con su entorno y con el desarrollo de sus familias.

Con el Programa de Educación Rural el Ministerio de Educación le garantizará a 176 mil niños de zonas rurales de Colombia, la posibilidad de terminar su proceso educativo sin necesidad de abandonar sus veredas.