Horas antes de finalizar la legislatura anterior, el Congreso de la República aprobó el Acto Legislativo 012 sobre Transferencias Territoriales. Una iniciativa de carácter gubernamental cuyo propósito fundamental es proporcionar un piso sólido a los recursos que la nación les transfiere a las regiones como participación para inversión social.

Durante todo el proceso de discusión del proyecto en el Congreso de la República surgieron interpretaciones erradas de la norma y, sobre todo, desinformación sobre la manera como afectaría a la educación y la salud.

Afirmaciones en el sentido de que el Acto 012 "privatizaba la educación y la salud" o que "recortaba la inversión" en esos sectores, fueron el caballo de batalla de quienes, muchas veces sin conocer a fondo el texto de la propuesta, lo convirtieron en pretexto para vulnerar el derecho de los colombianos a la educación y a la salud.

Por esa razón, Al Tablero explica porqué la reforma a las transferencias es un buen negocio para todos:

Lo que hizo el Acto 012 fue reformar la manera como las regiones participan de los Ingresos Corrientes de la Nación para evitar que ante un eventual derrumbe de la economía las regiones salieran perdiendo. Es decir que a partir de ahora, y durante siete años, los recursos que recibirán las regiones no estarán atados a los vaivenes de la economía nacional sino, que se les garantizará una base estable (inflación causada) y creciente.

La reforma a las transferencias constituye una oportunidad única para ordenar la casa. Para organizar las plantas, introducir controles al gasto, asegurar el uso más eficiente de los recursos, precisar competencias entre entidades territoriales, y transferir los recursos con mayor equidad.

Otra de las ventajas del Acto es la siguiente: se estableció que si durante el período de aplicación de la norma los ingresos de la nación crecen por encima del 4%, esa diferencia se revierte a las regiones. En otras palabras, si a la economía le va mal, el sector educativo tiene asegurados sus recursos, y si le va muy bien, la educación participa de la bonanza.

Por otra parte, el Acto 012 fortalece la educación pública. Al reconocer el Gobierno el costo actual de 329.000 docentes y administrativos departamentales y municipales, les está asegurando el pago de sus salarios y prestaciones, a pesar de que la nación no estaba obligada a hacerlo con todos.

De otro lado, al sanear las finanzas de la nación y al tratar de poner orden en el sector, se podrán liberar recursos financieros que se necesitan para invertir en calidad y cobertura. El Acto 012 le pone punto final, o por lo menos representa un avance, al desorden actual en el que la mayoría de municipios y departamentos destinan el 100% de los recursos del sector exclusivamente al pago de la nómina.

Y finalmente, está comprobado que el aumento en la eficiencia en la distribución de los recursos puede generar cupos adicionales. Esto ya es una realidad mediante la aplicación de los Planes de Reorganización departamentales y municipales, cuya puesta en marcha ha permitido la creación de más de 240 mil cupos nuevos en el último año. Es decir, con unas finanzas públicas saneadas y más organización y eficiencia en el sector educativo, el país podrá aspirar a más y mejor educación.

Con la aprobación del Acto Legislativo 012 sobre transferencias a las regiones, el Gobierno garantiza una fuente financierasegura y oportuna para la salud y la educación.