Actualizado el 24 de Septiembre de 2012

"Gracias a la educación he podido superar la pobreza extrema y abrirme horizontes de posibilidades en un proyecto de vida vinculado al conocimiento". Blanca Omaira Correa Otálvaro

Como egresada de un Centro Educativo Rural de Abejorral, Antioquia "Jesusita Jiménez", La Llanada, he estado en contacto permanente con la educación rural, aspecto este que me permite tener sensibilidad frente a las problemáticas de la educación.

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Soy de origen campesino, de familia de recolectores de café en el Suroriente de Antioquia. Crecí al lado de las muladas, carrieles, dados y guitarras de los arrieros. Con el suave olor de las montañas, el fresco trasegar de los ríos y quebradas, el mañanero sonido de las aves y la invitación temprana a las labores gravadas en mí ser, auténticamente campesina.

Como egresada de un Centro Educativo Rural de Abejorral, Antioquia "Jesusita Jiménez", La Llanada, he estado en contacto permanente con la educación rural, aspecto este que me permite tener sensibilidad frente a las problemáticas de la educación, en especial de su calidad y cobertura.

Gracias a la educación he accedido a oportunidades tan importantes y significativas en mi vida profesional y personal, como hacer parte del selecto grupo de FORMADORES del Programa para la Transformación de la Calidad de la Educación "Todos a aprender" del Ministerio de Educación Nacional", esto se lo debo a los excelentes maestros que han pasado por mi vida y a mi familia. Por ello, he podido superar la pobreza extrema y abrirme horizontes de posibilidades en un proyecto de vida vinculado al conocimiento.

Es esta lección la que deseo transferir a todos los colegas docentes del territorio nacional. El factor más importante portador de calidad de la educación, es el MAESTRO, y en buena hora el Ministerio de Educación Nacional hace una apuesta al acompañamiento in situ para la formación de los maestros.

De manera mancomunada, en el día a día y en la cotidianidad del aula de clase, con un docente como par, se dará relevancia al carácter dialógico de la profesión docente y su accionar propio, EDUCAR, que en palabras de Fernando Savater, es "... La más humanizadora de las acciones humanas".

Mis hijos Juan Alejandro y María Sofía son el motor de mi vida y quienes me impulsan a contribuir a un mundo más humano, con la educación como factor esencial en el mejoramiento de las condiciones de vida de las personas y el ejemplo como lección.

Blanca Omaira Correa Otálvaro