Colombia se prepara para recibir a los mandatarios regionales elegidos el 28 de octubre pasado. Los educadores, desde luego, tienen expectativas por los programas que cada uno de ellos desarrollará en el sector, si su gestión se orientará a consolidar los resultados obtenidos o si habrá nuevos énfasis en las políticas. Todos esperan que la educación tenga un papel preponderante en la agenda de gobierno.
Los nuevos gobernantes tienen a su alcance el Plan Nacional Decenal de Educación ( www.plandecenal.edu.co ), con sus diez temas que orientarán la educación en los próximos años y que constituyen un referente y el horizonte para formular los planes de desarrollo educativo de las regiones.
Los maestros esperan de sus gobernantes el impulso a programas de formación que enriquezcan su labor pedagógica para mejorar el nivel de competencias en los niños, y que desarrollen sus habilidades para resolver conflictos y promover el desarrollo de la comunidad educativa. Igualmente, la consolidación de mecanismos de identificación y socialización de experiencias significativas, la conformación de redes de aprendizaje y cooperación que contribuyan al desarrollo sostenido de la institución educativa.
Aunado a lo anterior, esperan mayor gestión de recursos y transparencia en su asignación, aplicación de criterios objetivos en materia de administración de personal, selección por méritos y manejo de los traslados con reglas claras. El pago oportuno de sus salarios, dotaciones, pensiones y cesantías, el saneamiento de las deudas, oportunidad y calidad en la prestación de los servicios de salud y el desarrollo de programas de bienestar. Esperan también canales de comunicación claros e información oportuna.
Son grandes los retos que deben asumir los nuevos gobernantes para garantizar el derecho a la educación y promover instituciones organizadas y eficientes, es decir, modernizadas, para que el servicio educativo sea de calidad. Hay que promover secretarías de educación con procesos definidos y sistemas de información ágiles para detectar donde falta un docente, donde un niño ha abandonado el sistema educativo, o donde se encuentran los niños desescolarizados. Adicionalmente, deberán hacer un efectivo control sobre los resultados de su gestión y fortalecer la rendición de cuentas.
Es necesario, por lo tanto, que los gobernantes de todos los departamentos y municipios, nombren en las respectivas secretarías de educación hombres y mujeres comprometidos con el desarrollo social y productivo, con la paz y con la educación. Finalmente, es la corresponsabilidad entre los gobernantes y los diferentes actores del sector en pro del mejoramiento de la educación.
Otros aspectos
- Definir espacios de comunicación con los rectores y docentes de cada uno de los establecimientos educativos.
- Presentar el presupuesto de inversión, con las partidas que se asignarán a cada acción propuesta.
- Exigir nombramientos basados en meritocracia.
- Fortalecer los sistemas de información.
Los nuevos mandatarios locales, la educación y los educadores, al tablero no.43 |